Con un poco de imaginación se pueden encontrar un sin fín de trucos para solucionar el problema de la falta de espacio.
Con unas Cestas, por ejemplo, que las hay de todas las formas colores y tamaños, podemos guardar cosas pequeñas y no tan pequeñas.
Algunas ideas de qué cesta elegir depende de lo que tengamos que almacenar:
-En unas cestas redondas, rectangulares o cuadradas podrás guardar a la perfección revistas y catálogos.
- Las planas y rectangulares, son muy prácticas para usarlas a modo de vaciabolsillos en mesa o estantería del vestíbulo para guardar el gorro, la bufanda, las gafas de sol o los guantes y las cartas...
También para grandes escritorios o mesas de trabajo.
En la cocina para organizar los botes de las especies o los frascos de aceite.
- Las cestas de ropa se pueden usar no solo para la ropa que irá a lavar sino también para guardar toda clase de ropa de cama, edredones, toallas o incluso artículos de limpieza.
- Las cestas altas redondas o cuadradas en el baño son un muy buen lugar para almacenar las toallas perfectamente enrolladas.
- Las cestas planas grandes con tapa serán un buen aliado para almacenar ropa de otra emporada bajo la cama, un buen sustituto de un armario, que ocupa la mitad, a mano pero no a la vista.
Otras ideas para almacenar con cestas:
Para guardar juguetes.
Para guardar y almacenar en la cocina.
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